Todos la señalan como la nueva conquista del crack Liones Messi, pero ella jura y perjura que no pasó nada. Lo cierto, es que estuvo en su departamento.
Se trata de Xoana González, la ex Soñando por Bailar, que ahora es señalada como la bomba sexy que Messi se llevó a su departamento.
El viernes pasado, el futbolista fue con un grupo de amigos que incluía a sus primos y guardaespaldas a la disco Ink de Palermo, después de ver a Adrián Suar en el Maipo con su nueva obra, La Guerra de los Roses y cenar con él y Susana Giménez en Piégari.
En Ink, desde su mesa en el VIP, donde también estaba Silvina Luna, enloqueció con Xoana, que bailaba en la pista junto a una amiga. “Lio me vio y flasheó”, dice la chica. Pero no fue Messi mismo el que se atrevió a encarar: “Me mandó a buscar por su custodio”. No es raro: ya había aplicado el mismo método con Zaira Nara hace varios años en Bariloche.
“Bueno, me senté con él”, narra Xoana: “Pegamos re buena onda, me dijo que estaba hermosa. Es un copado total”.
Xoana, a dos meses de salir de la isla de Soñando en el Delta del Paraná, no pierde el tiempo. Oriunda de Banfield y con estudios en mecánica, ya formó su propio grupo de reggaeton, La Innovación. Y con Messi no perdió el tiempo tampoco: “A eso de las 4 de la mañana nos fuimos todos a desayunar en la camioneta de Lio, una BMW X6”. ¿Destino? El piso 34 del edificio Chateau Puerto Madero. “¡Es terrible departamento!”, afirma Xoana. Y lo describe por dentro: “Plasma de no menos de 32 pulgadas, sillón beige, cortinas grises, muy minimalista todo”. Allí, “hablamos de cumbia santafesina y jugamos a la PlayStation o uno de esos fichines”.
¿Hubo rock? Según Xoana, Messi durmió solo: “Lio se fue a dormir para irse después a concentrar. ¡Nunca pasé del living! Qué sé yo, había mucha gente. Si estábamos solos me lo comía”.
Se trata de Xoana González, la ex Soñando por Bailar, que ahora es señalada como la bomba sexy que Messi se llevó a su departamento.
El viernes pasado, el futbolista fue con un grupo de amigos que incluía a sus primos y guardaespaldas a la disco Ink de Palermo, después de ver a Adrián Suar en el Maipo con su nueva obra, La Guerra de los Roses y cenar con él y Susana Giménez en Piégari.
En Ink, desde su mesa en el VIP, donde también estaba Silvina Luna, enloqueció con Xoana, que bailaba en la pista junto a una amiga. “Lio me vio y flasheó”, dice la chica. Pero no fue Messi mismo el que se atrevió a encarar: “Me mandó a buscar por su custodio”. No es raro: ya había aplicado el mismo método con Zaira Nara hace varios años en Bariloche.
“Bueno, me senté con él”, narra Xoana: “Pegamos re buena onda, me dijo que estaba hermosa. Es un copado total”.
Xoana, a dos meses de salir de la isla de Soñando en el Delta del Paraná, no pierde el tiempo. Oriunda de Banfield y con estudios en mecánica, ya formó su propio grupo de reggaeton, La Innovación. Y con Messi no perdió el tiempo tampoco: “A eso de las 4 de la mañana nos fuimos todos a desayunar en la camioneta de Lio, una BMW X6”. ¿Destino? El piso 34 del edificio Chateau Puerto Madero. “¡Es terrible departamento!”, afirma Xoana. Y lo describe por dentro: “Plasma de no menos de 32 pulgadas, sillón beige, cortinas grises, muy minimalista todo”. Allí, “hablamos de cumbia santafesina y jugamos a la PlayStation o uno de esos fichines”.
¿Hubo rock? Según Xoana, Messi durmió solo: “Lio se fue a dormir para irse después a concentrar. ¡Nunca pasé del living! Qué sé yo, había mucha gente. Si estábamos solos me lo comía”.
0 comentarios :
Publicar un comentario